miércoles, agosto 09, 2006

La decisión de Brooke

Vi Viviendo con mi ex (The Break-Up), peli que puede pensarse como una comedia de rematrimonio, pero que finalmente no lo es. Quería detenerme en el final del film, que no es el final feliz que de entrada uno supone para una película como esta y que puede generar diferentes posiciones. Que finalmente Brooke (Jennifer Aniston) y Gary (Vince Vaughn) no terminen juntos, suena en primera instancia arbitrario, ya que después de intentar todo lo posible para que Gary cambie y deje de lado su egoísmo (madure, bah) Brooke decide rechazarlo, justo cuando él toma conciencia. Como escribió el amigo Chicle Cosmos en una revista (cuyo nombre prefiero no dar para no hacer publicidad gratis aunque acá al lado tienen el link a esa publicación, la que empieza con el artículo El) este final parece demasiado arbitrario y le estaría quitando a la película su razón de ser. Debo decir que si bien en principio estuve de acuerdo con esta idea, luego de pensar un poco le doy la razón a Brooke, y por lo tanto creo que el final no es nada arbitrario sino absolutamente lógico, entendible si tomamos el punto de vista de ella. Y aunque hubiera preferido un final feliz, no puedo decir que este final no sea coherente con lo que vive el personaje de Aniston durante toda la película. Cada discusión es llevada por Gary un paso más allá, con un nivel de agresividad que al principio suena gracioso pero que al segundo chiste ya empieza a incomodar (hasta me sentí como cuando veo discutir parejas en la calle y me ponen tan incómodo que prefiero mirar para otro lado). Lo mismo sucede con las tácticas que cada uno emplea para generar celos en el otro. Por su parte, ella decide mostrarle a Gary los hombres con los que tendrá alguna cita, en un juego casi adolescente que tiene como fin recuperar a su pareja, mientras que él decide organizar una orgía para directamente humillar a su ex pareja . Cuando finalmente ella decide dar un último paso para recomponer las cosas, él, a puro egoísmo, vuelve a fallar. Luego, cuando sí se dé cuenta de cómo son las cosas (en realidad cuando ella y su mejor amigo se lo digan de forma muy explícita), ya será demasiado tarde, porque ya habrá agotado todas las posibilidades que se le brindaron, y el dolor generado en Brooke llevó la relación a un punto sin retorno. Por esto digo que el hecho de que no terminen juntos no es arbitrario, sino que es cabalmente comprensible que ella decida que las cosas se den así. La película parece decir que todo tiene un límite, incluso el amor o los deseos de estar con alguien. Puede resultar amargo, incluso uno se puede pelear son esta idea, pero no se la puede invalidar sólo porque uno prefiera lo contrario.Y de la misma manera que entiendo la decisión final de Brooke, también comprendo cómo pudo enamorarse de semejante animal: básicamente porque es absolutamente adorable, y ese es uno de los grandes méritos de la pelícua (y desde ya de ese gigante que es Vince Vaugh): permitir que Gary se exponga en toda su humanidad sin nunca ser juzgado, sino más bien lo contrario; incluso uno también llega a comprender a Gary (y, uf, hasta reconocerse en alguna de sus actitudes). Viviendo con mi ex es entonces una película algo amarga, porque dos personajes que resultan muy queribles no terminan juntos. Pero bueno, vamos, esto es así, y tal vez no sea tan grave. Por algo ellos se vuelven a cruzar tiempo después y demuestran que no se guardan ningún rencor.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

doloroso pero cierto: "todo tiene un límite, incluso el amor o los deseos de estar con alguien"

happygilmore dijo...

Hijo de puta, me convenciste. Tenés razón, tengo que verla de vuelta y después escribir un Llego tarde. Maldito, maldito!!! Varios me plantearon cosas parecidas, pero tu argumento me resulta el más convincente. Grrrr...

Sebastián Nuñez dijo...

jeje... bueno, a veces pasa y otros te terminan convenciendo. Por ejemplo últimamente yo ando escuchando mucho un disco llamado Nebraska.

happygilmore dijo...

Jajaaaaaaaaaaaa, excelente. Nebraska rulea.

M. dijo...

Muy buena película. Incomprendida creo yo. Estoy de acuerdo con lo que decís, y es más, no me dan ganas de escribir sobre la película porque terminaría diciendo casi lo mismo que vos, pero peor escrito, obviamente.

Un gran Vince Vaughn, en todos los sentidos.